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Vuelo rasante VII

Foto del escritor: Cristóbal JoannonCristóbal Joannon

                           


 Hipótesis

 

Frase que suele repetir un amigo filósofo cuando escucha algo muy absurdo, irrelevante o arbitrario: “La racionalidad es una hipótesis”.

 

 

Jugar a vivir

 

Jugar a vivir, no como evasión, sino como triunfo ante uno mismo. Abandonar sin más el paradigma trágico de la existencia, el miedo que corta las alas y termina por enredarlo todo.

 

 

Cambio de rueda incaico  

 

Cerca de Ollantaytaimbo, en Perú, pasé una tarde junto a un camino esperando una micro. Había un hoyo feo. Dos autos cayeron en él y se les reventó una rueda. En ambos casos se bajaron los pasajeros en silencio, la cambiaron sin apuro en una suerte de operación fluida, se subieron al auto y partieron. La ausencia de alegatos mostró que la condición de problema es discutible.

 

 

Altamar

 

Debe ser bastante impresionante ver correr a los ratones que se han dado cuenta de que el barco en que también vamos está a punto de hundirse.

 

 

Criterio 

 

Pregunta que le escuché a un montajista de televisión en 1997 mientras mirábamos el resultado del trabajo que habíamos hecho, a cinco horas de salir al aire, es decir, con la soga al cuello, considerando que los recursos habían sido escasos y que la máquina de edición había dado problemas desde que nos sentamos a armar el reportaje: “¿Esto es más malo que bueno, o más bueno que malo?”.

 

 

Cada vez más sombrío  

 

Cuando se dice que un autor con los años se fue poniendo cada vez más sombrío da pena y miedo.

 

 

Fuera de control  

 

Me encantaba cuando en la casa de mis abuelos maternos se mencionaba que algo o alguien había quedado fuera de control: una máquina, un animal, una persona de la que no cabía dudar de su cordura. Más allá de la razón que podía explicar el desajuste, me gustaban los detalles; eran lo más parecido a una película. Ahora recuerdo dos: una podadora que no había cómo detenerla ni apagarla, y un niño de mi edad que se había enojado tanto con sus padres que tomó una silla y la tiró contra un ventanal gritándoles cosas “irrepetibles”. Me imaginaba figuradamente al pulpo de Fantasilandia moviéndose de manera impredecible, alargando y acortando sus tentáculos mientras la gente salía disparada; era como si el azar hubiera dirigido los acontecimientos. Las historias terminaban ahí: nadie tenía idea de cómo se las había arreglado el jardinero ni qué castigo le habían dado al niño. Yo me preguntaba si era posible que algo quedara fuera de control para siempre. ¿Podía pasarle a uno?

 

 

Axioma estoico

 

Nada de quejas mientras alguien esté peor que uno.

 

 

Pececillo  

 

Línea final de una columna de Larry Moe en Las Últimas Noticias en que defiende a un humorista que está siendo lapidado en las redes sociales por mojigatos que no dan la cara: “¿Vieron? En lo peor siempre habita lo mejor. O casi siempre. Ánimo, pececillo”.

 

 

Azar  

 

“No me feliciten tanto”, algo así podría decir el Cristo de Elqui ante el lugar que ocupa el azar en todo lo que hacemos. Woody Allen lo declaró hace poco en un diario: le habían preguntado por el éxito.

 

 

Dos canciones del Bossanova de Pixies  

 

Recuerdo la impresión que me produjo “Rock music” de Pixies la primera vez que la escuché: el death metal es una guagua de pecho al lado de esta canción realmente fuerte. Pregunta que vino a continuación: ¿se podrá llegar más lejos? Tal vez, aunque no es claro que se necesite. La otra es “Down to the well”: hundiéndose en el pozo, pero con la actitud correcta. Dice en un momento: “Qué importa que un amor no sea largo si hay canciones favoritas sonando en la cabeza”. Hace poco vi la entrevista en que David Bowie celebra el sonido, euforia y capacidad de transformación de Pixies; a su juicio, son unos Beatles bajo psicosis. Cuenta que al escucharlos resulta difícil no querer formar una banda así.

 

 

Turismo de masas 

 

Terror comparable a los Jinetes del Apocalipsis, pero sin estruendos ni llamaradas en el cielo.

 

 

Posible crítica

 

Muy serio y cuerdo antes de tiempo.

 

 

Lista negra  

 

Hay personas que parecen tener una lista negra siempre a mano: alguien les falla, no importa en qué nivel, y se anota su nombre. Se le puede perdonar si es capaz de justificar su error y se muestra verdaderamente arrepentido, pero en ningún caso saldrá de la lista. Es irreversible. ¿Les gustará producir en los demás la sensación de vivir sobre un tejado de vidrio? ¿Por qué estos inquisidores se ven a sí mismos como seres especiales, por no decir superiores? Demócrito se reiría de todo esto; dice que los criticones al final se quedan sin amigos.

 

 

Teclados embrujados  

 

Los teclados embrujados de “Girl I love you” de Massive Attack. Parecen oboes. Ah, el video que hizo Pink Flag Studio de la canción (2023), lo que vemos mientras suenan. De dónde vendrán.

 

 

Fantasías tanáticas  

 

Observar y vivir la destrucción total, zozobrar; en último término, morir. La tragedia purga estas emociones radicales, por eso la catarsis se experimenta como un alivio de fuerzas que se ubican más acá del bien y del mal. Podría hacerse una lista de terrores fugitivos.

 

 

Por supuesto  

 

Hay autores que cuidan mucho el uso de la expresión “por supuesto”, pues saben que es un signo de unidad con el lector, para no hablar de hermandad. Estoy pensando específicamente en Thomas Bernhard y William Burroughs. Suelen sacar risas. A mi abuela paterna le cargaban los autores confianzudos, como ella los llamaba. Qué ganas de haberle preguntado lo que pensaba sobre esta expresión y otras similares. ¿Su crítica habrá apuntado a esto?

 

 

Nacer  

 

Ayer cayó un avión cerca de Sao Paulo. Nadie sobrevivió. Tres personas no pudieron tomar el vuelo. Una de ellas le dijo a un periodista: “He nacido”. ¿No deberíamos sentirlo siempre? Cuántas desgracias nos rozan sin que lo sepamos.

 

 

Poesía moderna  

 

Qué exacto es Horacio al recordarnos que vivimos abrumados por tonterías. Lleva inevitablemente a la pregunta de por qué no hemos hecho algo.

 

 

Añoranza  

 

En términos pragmáticos, sentir añoranza es perder el tiempo, sobre todo si consideramos que es muy probable que en el futuro sintamos añoranza de este momento. Así piensan en general los vaqueros y se les ve bastante bien. Dejar atrás, olvidar.

 

 

Mortificación y autosacrificio  

 

Me gustaba mucho preguntarle a mi abuela Elena por asuntos que podían sonar un poco extraños en los círculos convencionales en que yo vivía. Ella los acogía bien. El marco era el respeto y la observación de las buenas costumbres; dentro de eso, todo podía caber. Una vez le pregunté si la mortificación y el autosacrificio eran lo mismo. Debo haber tenido unos diez años. Me dijo que sí. Eran cosas terribles, propias de personas que no entendían nada. Me habló de los faquires y de la gente que lavaba la ropa a mano en invierno pudiendo usar una lavadora.

 

 

Veinte tiburones por dar las gracias  

 

En el Ejército tampoco se piden las cosas por favor. Así me recibieron en el Batallón Germania donde hice, en 1991, el servicio militar para estudiantes. Preparación para la guerra. Órdenes, no peticiones. Matar si hay que matar, morir si hay que morir. Todo siempre bien claro.

 

 

Comienzo

 

La posibilidad de que nunca haya existido nada debería ser de un 50%. Otro número permitiría imaginar una suerte de gran diseño sub specie aeternitatis —suma felicidad para algunos, fiesta funada para otros.

 

 

Cosa mentale  

 

Ordenar y resolver la vida con palabras, ojalá ya.

 

 

Multifactorial  

 

Hay palabras que con el tiempo adquieren una gran capacidad para calmar las aguas. Decir que el origen de un problema es “multifactorial” produce un alivio inmediato. No hay una única causa: es una red, quizás una constelación de piezas no necesariamente accesibles ante la que debemos ser modestos. No es razonable buscar siempre responsables, y qué es eso de aspirar a entender o explicarlo todo.

 

 

Fiebre del oro

 

Durante la fiebre del oro de California quienes más dinero ganaron fueron los vendedores de palas y picotas. Es difícil imaginar cuánto nos puede afectar una noticia así, por tarde que llegue.

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